Diferencias entre astenia y fatiga
En ocasiones, el cansancio puede ser puntual, originado por actividades más intensas de lo habitual y que se recuperan con un correcto descanso. Si esto ocurre, nos encontramos ante fatiga. Los síntomas son muy similares a los de la astenia, pero suelen ser temporales.
La astenia primaveral, sin embargo, perdura en el tiempo y puede llegar a convertirse en crónica. La sensación de falta de vitalidad puede acarrear dificultades tanto mentales como físicas a la hora de realizar actividades sencillas que, con anterioridad, se realizaban sin ningún tipo de dificultad.
Causas de la astenia primaveral:
No existe una causa concreta que desencadene la astenia primaveral. Sin embargo, los síntomas suelen estar relacionados con tres tipos de origen distintos que nuestro especialista en medicina familiar de Onda, nos distingue:
- Envejecimiento: En el proceso natural de la vejez, los músculos pierden fuerza y, el organismo en general encuentra cada vez más dificultades para afrontar el día a día con energía. El envejecimiento prematuro y los primeros años de este, ejercen en el paciente una debilidad general que puede considerarse astenia.
- Vida sedentaria: El deporte es una de las formas más naturales de recargar el cuerpo con energía y vitalidad. La falta de actividad física ralentiza el funcionamiento del organismo y debilita la musculatura, hasta el de poder desembocar en astenia.
- Depresión: Aunque los síntomas de la astenia primaveral son, en su mayoría, de origen físico, una de sus causas puede ser el bajo estado de ánimo del paciente y la depresión. La falta de actividades, tanto físicas como sociales, puede desembocar en un estado general cansancio que no remitirá sin el tratamiento de la depresión.
- Estrés/ ansiedad: Un ritmo de vida excesivamente elevado, tanto física como mentalmente, puede provocar en el paciente un agotamiento causado por la tensión permanente que sólo podrá tratarse si se atiende en primera instancia el origen de las dolencias.
- Infecciones: Los daños sufridos en el organismo por enfermedades, pueden desencadenar en fallos generalizados que reduzcan drásticamente la fuerza y la energía.
- Alergias: Una de las causas más comunes de la astenia primaveral son las temidas alergias. Las reacciones alérgicas a alimentos o agentes externos provocan debilidad en el organismo de manera que, si no se trata la enfermedad, puede desembocar en astenia.
- Trastornos endocrinos: La alimentación es la principal fuente de energía con la que cuenta el ser humano. Por tanto, cualquier trastorno relacionado con la ingesta de comida, podrá dañar al organismo causando, entre muchas otras enfermedades, astenia por falta de fuente de energía.
- Afecciones neuromusculares: Otros tipos de enfermedades de distintas índoles pueden afectar a la vitalidad general del cuerpo humano. Dependiendo de la gravedad de las dolencias, el cansancio podrá derivar en astenia que se hace aún más presente en primavera.
Tratamiento de la astenia primaveral

Como hemos visto, la astenia no es una enfermedad en sí misma que tenga unas causas concretas que tratar, sino que deriva de otro tipo de enfermedades que, al dañar al organismo, provocan en él cansancio generalizado.
Por tanto, el mejor tratamiento de la astenia primaveral pasará por la resolución de la causa concreta que ha provocado la enfermedad.
Como norma general, para curar la astenia primaveral, dos pasos fundamentales son:
- Practicar actividad física: El ejercicio físico ayudará a disminuir el estrés, es una excelente fuente de energía y genera endorfinas que “recargan” el cuerpo.
- Acudir a terapia psicológica: Las terapias cognitivo-conductuales ayudarán a aprender a llevar los problemas, incentivando a ver cada obstáculo como un aprendizaje y mostrando la parte buena de las cosas. Este tipo de terapias serán fundamentales en los pacientes que sufren astenia sin motivos físicos aparentes.
Como hemos visto, la astenia o astenia primaveral es una sensación de cansancio generalizado que se da generalmente en la primavera y puede alargarse en el tiempo. Una exploración médica general como las que ofrece el centro médico de Onda, ayudará a esclarecer los motivos de la dolencia y, por tanto, a minimizar los síntomas e incluso curar la enfermedad.