Otitis: prevención y tratamiento de la infección de oídos.
Aunque las vacaciones están llegando a su fin, aún sois muchos los que disfrutáis de unos días libres. Y qué mejor plan que pasarlos con un bañito para soportar mejor el calor, ¿verdad?

Aunque las vacaciones están llegando a su fin, aún sois muchos los que disfrutáis de unos días libres. Y qué mejor plan que pasarlos con un bañito para soportar mejor el calor, ¿verdad?
No lo podemos negar, no hay nada como refrescarse en la playa o la piscina. Pero hay que tener cuidado, ya que esta actividad que a priori parece inofensiva, puede acarrear una serie de dolencias típicas del verano. La más común es la otitis. Y es que, nuestro cuerpo permanece en contacto con el agua más tiempo de lo habitual, lo que puede originar infecciones indeseadas.
Así que, de la mano de nuestro otorrinolaringólogo en Onda, os mostramos los consejos más útiles para evitar la otitis o para tratarla correctamente si ya has caído en sus redes.
La otitis se produce por la entrada de agua en los oídos que provoca infecciones debido a la humedad y las bacterias. Así que, si queremos evitarla, lo mejor es cubrir los orificios con un gorro. Los tampones no serán necesarios para la prevención puesto que pueden provocar un cúmulo de cera en el interior del oído que facilitará la proliferación de infecciones.
No es lo mismo sumergirse en una piscina que en un estanco o balsa. En estos lugares el agua suele contener un sinfín de bacterias extremadamente peligrosas para los oídos. La playa y la piscina con la justa medida de cloro son las opciones más saludables.
Aunque las piscinas no suelen tener más de 2 o 3 metros en vertical, no es lo mismo bucear tocando el fondo que hacerlo por la superficie. Cuanto más se baja, más presión ejerce el agua, algo que no beneficia en absoluto la salud de nuestros oídos.
Si eres un enamorado del baño estival, es muy difícil conseguir que no bucees y te diviertas. Pero debes ser consciente de que esta es una de las actividades que más influye en la otitis. Si puedes refrescarte sin sumergir la cabeza en el agua, reducirás las probabilidades de sufrir otitis.
La otitis suele venir dada por una infección en el oído. Por norma general, esta desaparece con los días. Si las molestias se alargan en el tiempo, será necesario tratar más a fondo la enfermedad para curar la otitis.
La otitis suele ser dolorosa, provocando pinchazos intensos en los oídos del paciente, acompañados de una leve sordera. Para sobrellevar el dolor, será suficiente con tomar paracetamol en las dosis que indique el doctor.
Si la otitis está relacionada con el baño estival (en la mayoría de los casos, así es) será imprescindible no realizar inmersiones en el agua al menos durante una semana. Tras este descanso, será recomendable usar gorro y tapones para evitar en la medida de lo posible la entrada de agua en los oídos.
Para las dolencias que se alarguen en el tiempo y no mejoren con paracetamol y espera, será necesaria una intervención médica específica llamada timpanocentesis. Este método consiste en la que se extrae el líquido acumulado detrás del tímpano, lo cual alivia considerablemente el dolor y acelera la recuperación de la infección.
Cuando la molestia dura más de 7 días, será conveniente el uso de antibióticos como la amoxicilina. Este tratamiento será necesario únicamente en casos de otitis aguda, y el tratamiento podrá durar de 5 a 10 días, según considere el especialista.
Como hemos visto, el mejor remedio para la otitis reside en la prevención. Si aún cumpliendo todos los pasos que indicamos, la dolencia acaba apareciendo, acude a nuestra clínica de Onda para tratarla de manera específica. ¡Y que nada te arruine lo que queda de verano!