Según nuestro dentista de Castellón, la gingivitis es una de las enfermedades de la boca más comunes pero que, sin embargo, puede prevenirse con la higiene correcta y tratamientos permanentes en la clínica especializada.
Para conocer cómo podemos prevenir la gingivitis, el primer paso es conocer los síntomas que indican que el paciente sufre la dolencia. Identificar los inicios de la enfermedad es clave para poner remedio lo antes posible y que esta no genere en una patología más grave.
Síntomas de la gingivitis:
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Sangrado durante el cepillado:
Sufrir un sangrado, sea leve o intenso, durante el cepillado, no es algo común, sino que es un síntoma de que algo no funciona correctamente en la salud dental del paciente.
Este síntoma es característico de la gingivitis, pero también puede ser una señal de inicio de una peridontitis.
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Inflamación y enrojecimiento:
Una encía en buen estado debe ser firme y rosada. El aumento de tamaño de esta o un aumento de color inusual, será una señal de alarma.
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Aumento de la sensibilidad y dolor:
Existen personas más sensibles a que los alimentos excesivamente fríos o calientes les causen molestias en las encías. Pero cuando la dolencia se convierte en recurrente a pesar de que los alimentos no tengan unas temperaturas extremadamente bajas o elevadas, nos encontraremos ante un inicio de gingivitis.

Prevención de la gingivitis:
La gingivitis suele darse por una falta de higiene bucal que ayuda a las bacterias a proliferar en la boca, convirtiéndose en dañinas para las encías. Esta placa, de color blanco o amarillento, no tiene porque ser visible, sino que puede encontrarse entre los dientes dando un aspecto de boca aparentemente limpia.
Por ello, la correcta limpieza de los dientes, junto con pautas concretas recomendadas por el dentista, se evitará en gran medida llegar a sufrir la molesta gingivitis.
Otras características, como un cambio hormonal, la diabetes o el uso de medicamentos agresivos, puede ayudar a que la enfermedad se acentúe.
Para prevenir la gingivitis, las pautas principales son:

- Cepillado diario, tras cada comida: Cepillarse los dientes tras desayunar, comer o cenar debería convertirse en una rutina necesaria, ya sea en casa o fuera de ella, para evitar la aparición de bacterias a causa de los alimentos ingeridos.
- Uso de hilo dental: En la mayoría de ocasiones, el cepillado dental no es suficiente para eliminar la totalidad de restos en la boca, especialmente los interdentales. Para ello, resulta muy útil el uso de hilo dental que llega con mayor facilidad a cada rincón de los dientes.
- Enjuagues bucales: Las soluciones antibacterianas o los colutorios con clorhexidina, serán un excelente complemento al cepillado.
- Ultrasonidos: Se utilizarán en los casos en que el sarro ya se haya acumulado en los dientes y la limpieza por cepillado no sea suficiente. Esta técnica eliminará por completo las bacterias que provocan la gingivitis.
- Pasta de profilaxis: Con el objetivo de eliminar manchas y aumentar los niveles de flúor que evitan la proliferación de bacterias, este tratamiento resultará especialmente efectivo tras la eliminación del sarro por ultrasonidos.
Seguir recurrentemente estas pautas de higiene en la vida diaria permite al paciente evitar en gran medida los problemas de gingivitis. Es importante que, si se detecta alguno de los síntomas de la gingivitis anteriormente citados, se acuda inmediatamente al especialista odontólogo. Si es tu caso, pide cita online en nuestra clínica de Onda y recibe el tratamiento que necesitas de la mano de nuestra dentista, la Dra. Sara Miota.